Realizada una comprobación limitada sobre un tributo y ejercicio impositivo concreto sin regularizar cuota, impide el inicio de otro procedimiento de comprobación limitada sobre el mismo periodo y tributo.
En sentencia de 4 de marzo de 2020 el Tribunal Supremo, en adelante el alto Tribunal o el TS, se pronuncia sobre si, cuando la Administración tributaria realiza una comprobación limitada sobre un determinado tributo y ejercicio impositivo, la cual finaliza sin regularización de cuota, puede iniciar con posterioridad otro procedimiento de comprobación limitada respecto del mismo tributo y período, para solicitar documentación distinta a la que fue requerida en el primer procedimiento, sin que existan nuevos hechos o datos que no estuvieran a disposición de la Administración en la primera comprobación realizada.
Según recoge la sentencia, si la Administración, en el primer momento en el que inicia una comprobación se “autolimita” en la realización de una comprobación meramente formal, esa “autolimitación” no puede justificar el inicio de un segundo procedimiento de comprobación por el mismo concepto impositivo y período para solicitar una documentación distinta, que pudo haber sido requerida con anterioridad, de forma que el motivo de que no obrara en poder de la Administración no es otro que no haber sido solicitado en el primer procedimiento de comprobación.
Por otro lado, y tal y como se considera en la sentencia analizada, se debe tener en cuenta que, por “nuevos hechos” no pueden entenderse nuevos datos que resulten de una documentación solicitada con posterioridad en el segundo procedimiento de comprobación, ya que no cabe un segundo procedimiento sobre el mismo sujeto pasivo, tributo y periodo si los datos que se pretenden comprobar ya pudieron haber sido examinados en el primero.
Si la Administración pudo haber contado con toda la documentación necesaria para valorar si procedía regularizar o no la situación con contribuyente en el momento de la primera comprobación limitada, lo que no puede hacer es volver a regularizar un segundo procedimiento de comprobación limitada, ya que no cabe “ex novo” apreciar “nuevos hechos o circunstancias” en unas actuaciones posteriores, pues dicho concepto no ha sufrido alteración alguna en la situación declarada por el sujeto pasivo y, en consecuencia, no puede hablarse de “novedad” que haya resultado de su apreciación en actuación de comprobación posterior.
Por ello, el Tribunal Supremo concluye que, realizada una comprobación limitada sobre un determinado tributo y ejercicio impositivo, la cual finalizó sin regularización de la cuota, no puede conllevar con posterioridad otro procedimiento de comprobación limitada respecto del mismo tributo y período, para solicitar documentación distinta a la que fue requerida en el primer procedimiento, sin que existan nuevos hechos o datos que no estuvieran a disposición de la Administración tributaria o que ésta no pudiera haber solicitado al contribuyente en la primera comprobación realizada.